Los universitarios trabajan por 600 euros

Mientras aprueban sus carreras, los jóvenes se conforman con contratos temporales y bajos salarios, aunque, pese a todo, se sienten satisfechos. El 56% no se ve empleado en lo que estudia.
Madrid- Siete de cada diez universitarios madrileños que trabajan se encuentran satisfechos con su empleo, aunque la mayoría de ellos están contratados temporalmente, principalmente en el sector servicios, y cobran menos de 601 euros al mes. Estas son algunas de las conclusiones extraídas del Barómetro Universitario 2006 realizado por la Escuela de Estadística de la Complutense (UCM) para el periódico «Menos 25», a partir de 1.335 entrevistas sobre 235.000 alumnos de las universidades públicas y privadas de la Comunidad de Madrid. Según el Barómetro, el 33,8 por ciento de los universitarios combina sus estudios con el trabajo, siendo el temporal su contrato más común (32,2%), seguido del fijo a tiempo parcial (11,2%) y a tiempo completo (11%). Casi un 9 por ciento tiene contrato de obra y servicio; algo más de un dos por ciento son autónomos; y se elevan hasta el 23 por ciento los que carecen de contrato. El de servicios es el sector más ocupado por los universitarios empleados de la Comunidad (34,3%), seguido, muy de lejos, por la industria (9,9%), la informática (6,9%), las telecomunicaciones (6,7%), la consultoría (5,2%) y la construcción (4%). En cuanto al salario, casi el 68 por ciento cobra menos de 601 euros mensuales, y sólo un 17,8 por ciento ingresa hasta 901 euros. Aunque más de la mitad de los universitarios con empleo se muestra satisfecho con el trabajo que realiza (53,4%), cerca de un 22 por ciento dice sentirse poco satisfecho y un 10,6 por ciento muy insatisfecho. Un elevado porcentaje de los consultados (69,2%) no dejaría la Universidad por un buen empleo, frente a un 15,6 por ciento que sí dejaría de estudiar, informa Efe. Respecto a la adecuación del empleo a su formación, el 46,4 por ciento reconoce que su trabajo no está nada relacionado con la carrera que estudia y apenas el 23 por ciento admite que sí lo están. La principal motivación al empleo de los universitarios madrileños es conseguir un futuro estable (8,28%) seguida de la realización personal (8,21%) y el sentimiento de utilidad social (7,32%). En cuanto a su futuro, sólo el 27,4 por ciento de los consultados piensa trabajar en la profesión para la que se está preparando; casi el 12 por ciento prefiere estudiar idiomas en el extranjero; y un 11,3 por ciento dice que realizará un curso de postgrado. Cerca del 10 por ciento de los encuestados trabajaría en cualquier trabajo que le saliera; el 9,5 por ciento prepararía oposiciones; y el 7,7 por ciento cursaría una nueva carrera. Al salir de la Universidad, a 56 de cada 100 le gustaría trabajar en algo relacionado con lo que ha estudiado y una gran mayoría (47,8%) cree que no tardará ni seis meses en conseguir empleo. Un seis por ciento se siente muy pesimista y cree que no lo hará nunca. Además, un 42% aceptaría un buen empleo en cualquier lugar del mundo.
La Razón